Es una pregunta que todos nos hemos hecho en algún momento de nuestra vida profesional, y no es fácil de responder; vamos a intentar desde esta entrada daros algunas ideas de lo que tenemos que hacer para intentar contestarnos a esa pregunta. Lo primero que debemos hacer es pararnos a pensar para poder tener muy claro qué es lo que de verdad te gustaría y planificar cómo conseguir el trabajo ideal.
Es muy importante que cuando nos paremos a pensar, pensemos en lo que de verdad nos gustaría hacer e intentar llegar a esa meta; para ello, es necesario que nos alejemos de lo que siempre nos han dicho que era el modelo de trabajo que consistía en trabajar cuantas más horas mejor, o si no es que no eres un buen trabajador; y que el trabajo se pague bien, si no estás perdiendo el tiempo y eres un fracasado. ¿O no?. Eso es lo que Roman Krznaric (autor de “Cómo encontrar un trabajo satisfactorio”) define como la “ética del trabajo”, que se nos ha impuesto desde siempre y de la que hay que desengancharse. ¿Por qué? Porque hay mucha gente infeliz siguiendo esas normas.
Motivaciones de un trabajo ideal
No es fácil aconsejar sobre el trabajo ideal de cada uno, pero sí es posible tener en cuenta que existen algunos factores que determinan la satisfacción de una persona en su puesto de trabajo:
Uno de los motivos que nos ayuda a la hora de determinar si un trabajo es el ideal para nosotros es el sueldo, pero como hemos dicho antes ni puede ni debe ser la única característica que llama más la atención de un puesto.
Cada día más, y sobre todo las nuevas generaciones de trabajadores (como muestra de ello, los millennials) una de las cualidades que más se valoran en un trabajo es la flexibilidad horaria para poder compaginarlo con otras actividades diarias. Es lo que se conoce como la conciliación entre vida personal y laboral.
Otro de los aspectos que más valoramos a la hora de calificar un trabajo como ideal es el ambiente de trabajo; es lo que definimos como clima laboral, que no es otra cosa que el medio en el que se desarrolla nuestro trabajo cotidiano. Las relaciones que tenemos con nuestros compañeros y nuestros superiores.
A la hora de valorar si un trabajo es el ideal para nosotros, debemos valorar también si ese trabajo nos va a dar la posibilidad de desarrollarnos profesionalmente y no quedarnos estancados; la adquisición de responsabilidades y mayores competencias dentro del puesto de trabajo también pueden mejorar nuestra percepción de ese empleo.
Otros aspectos a valorar
¿Qué otras cosas debemos tener en cuenta a la hora de valorar un puesto de trabajo? otros dos temas en los que debemos pensar son la seguridad en el puesto y la oportunidad de cambiar de puesto dentro de la propia empresa.
Una vez que tengamos claro hacia donde queremos y debemos ir para conseguir nuestro puesto de trabajo ideal, no debemos olvidar nunca la formación continua para poder alcanzar nuestras metas profesionales.
Resumiendo y utilizando las palabras del anteriormente citado Roman Krznaric si queremos hablar de trabajo ideal o de trabajo satisfactorio diríamos que: “Si deseamos experimentar la realización en el trabajo en su mayor forma, debemos hacer todo lo posible para trabajar de un modo que encaje con quienes somos, con todos nuestros defectos y nuestras cualidades, y si podemos elegir entre seguridad y libertad, propongo que elijamos la libertad.”
Fuente: Juan Carlos Barceló, Profesor de los Master en Dirección de Recursos Humanos y MBA de IMF Business School.